El cuidado estético está presente en la vida de las personas de alguna forma u otra, y en muchos casos ocupa una cierta cantidad de tiempo en nuestras vidas. Cuando pensamos en las vacaciones, nos vienen a la memoria los buenos momentos vividos, muy relajados y sin preocuparse tanto por el aspecto físico. Sin embargo, a la vuelta de las vacaciones comienza la preocupación por recuperar la mejor versión de nuestro aspecto físico a través de dietas, limpieza de cutis, lifting no quirúrgico, masajes y hasta un trasplante capilar si es necesario.
Recuperar la hidratación de la piel
En primer lugar, hay que recuperar la hidratación de la piel con el uso de los productos habituales y consultando con el o la cosmiatra de cabecera, en caso de que haya que agregar uno de emergencia. Los productos con aceites esenciales o con ácido hialurónico casi siempre resultan los más apropiados.
En el caso de necesitar algo con más potencia, seguramente un dermatólogo puede aconsejar tratamientos más exhaustivos como máscaras con productos especiales, plasma rico en plaquetas o cualquier otra terapia que desinflame la piel y le brinde frescura.
Las típicas manchas en la piel
La exposición al sol sin protector o con el uso de un protector no adecuado, puede terminar con la aparición de manchas oscuras en cualquier parte del cuerpo, pero con más frecuencia en la cara. Además de las cremas que facilitan la pigmentación y que se pueden comenzar a utilizar cuando ya no nos vamos a exponer al sol, existen tratamientos para ser realizados en un centro de estética por profesionales, como el Diamondpeel, entre otros.
La aparición de nuevas arrugas
Cuanto más al sol estemos expuestos, menos colágeno va a tener nuestra piel. En esa situación, los mejor será utilizar tratamientos y terapias para fortalecer el colágeno que queda en la piel. De esta forma, es posible atenuar las arrugas leves y evitar que aparezcan nuevas.
Pieles opacas y sin brillos
Después de las vacaciones la piel de todo el cuerpo se ve más opaca y sin su brillo natural por la exposición al sol, al viento y a la acumulación de células muertas y de impurezas. Los tratamientos basados en la oxigenación celular y la limpieza con productos nutritivos pueden hacer milagros en estos casos.
Por último, queda aplicar alguna terapia como el tratamiento criolipólisis en Buenos Aires para aquellos que quieren un método no invasivo para eliminar la adiposidad de forma segura, sin cirugías. A través de este tratamiento, se puede reducir la grasa en los lugares más difíciles, en los que ni la dieta ni el ejercicio puede vencer.
Hoy en día existen tratamientos mucho menos invasivos y más efectivos para mejorar la piel y la estética general después de las vacaciones, por lo que hay que saberlos aprovechar.