Seis beneficios de los alimentos congelados

La necesidad de conservar los alimentos siempre estuvo presente en la historia de la humanidad, con el objetivo de tenerlos disponibles para cuando fuera más difícil conseguirlos. Antes de la invención de las heladeras y freezers, las personas trataban de conservar su comida con la cocción, el ahumando, el salado y el hielo, con diferentes resultados. La primera vez que se congelaron los alimentos con fines comerciales fue en 1842, con la utilización de una máquina parecida a una congeladora mecánica. Sin embargo, la congelación de alimentos como la conocemos ahora es una historia mucho más reciente.

El uso de la congelación y la ultracongelación ha sido una revolución dentro de la industria, a pesar de que también ha sido muy criticada y debatida como método de preservación.

Hoy en día, los alimentos congelados vuelven a tomar importancia debido a que las últimas investigaciones realizadas sobre ellos revelan que, con un uso adecuado, presentan varios beneficios tanto para usuarios particulares como comerciales.

Los beneficios

Las condiciones de seguridad e higiene. Los alimentos congelados se degradan más lentamente, y también están protegidos contra muchos microorganismos y bacterias gracias a la congelación.

Siempre están frescos. Cuando los alimentos congelados han sido preservados de la forma correcta, mantienen su frescura, textura, sabor, color y apariencia.

Cualidades nutritivas: La mayoría de los nutrientes de los alimentos congelados se conservan sin tener casi ninguna pérdida de su valor.

Su poder de utilización. Casi todos los alimentos pueden congelarse y mantenerse de esa forma por un tiempo determinado, de acuerdo con su tipo.

Aprovechamiento. Se aprovecha casi un 100% de los alimentos congelados.

Sin estacionalidad. Se pueden utilizar diferentes alimentos de estación todo el año al conservarlos congelados.

Ofrecen comodidad. Siempre disponibles cuando se los necesitan, inclusive los que vienen crudos o a medio preparar.

Los beneficios de los productos congelados son muchos para el uso hogareño y comercial (en restaurantes, hoteles, etc.). No obstante, es importante conocer muy bien las características de cada producto para definir el tiempo de conservación apropiado de acuerdo a cada tipo de alimento.

Por otro lado, para que todos estos beneficios se cumplan, es esencial tener en cuenta la forma correcta de congelarlos y de descongelarlos. En general, lo más recomendable para su descongelación es sacarlos del freezer y dejarlos en la heladera por 24 horas. No se recomienda descongelarlos a temperatura ambiente, ya que se pueden reproducir algunos microorganismos que no se eliminan con la congelación o perder los nutrientes.

Como se mencionó anteriormente, aunque la mayoría de la personas considera que los alimentos frescos son más saludables que los congelados, en general, el proceso de congelación conserva mejor las propiedades nutricionales de todos los productos. Asimismo, la reducción del desperdicio de alimentos es mayor con los congelados que con los frescos.